jueves, 17 de diciembre de 2015

12/12 El viatge de la meva vida

Ara si, últim día. Ja fa més d'un més que som en terres Australianes i ha passat volant!
Una part de mi no vol que s'acabi, i l'altra... tampoc. Bé, si, una miqueta. Ja tinc ganes de poder abraçar als meus.

Ha estat un viatge ple d'emocions :
Sentir la tendresa al agafar un koala entre els teus braços,













trobar antics vaixells atrapats a Fraser Island,













conduïr durant dues setmanes per Queensland i veure en persona aquelles senyals que tantes vegades ens ha ensenyat la tele,













sobrevolar la Great Barrier Reef













i submergint-nos-hi descobrint les meravelles que ens amaguen les profunditats del mar per enamorar-me d'Airlie Beach i les seves Whitesundays.













Tenir unes ganes bojes de tornar amb un wallabie a la maleta,













dutxar-nos enmig de la selva de Cape Tribulation













i nedar amb tortugues entre coralls.













Volar fins al desert d'Ayers Rock i matinar mooooolt per veure-hi sortir el sol,













emocionar-me com una adolescent al veure la Sydney Opera House,













recórrer el GOR per trobar els 12 Apostles,













salvar un koala perdut a la carretera,













passejar pels carrers de Melbourne,













conèixer Santa Claus,













i viure el Nadal en màniga curta













sempre amb la millor companyía del món!











Gràcies a tots els que ens heu seguit, els que heu comentat i els que no, els que només miraveu les fotos i els que ni tan sols ens coneixeu.
Gràcies per fer-nos companyía.
Fins la propera!

Ingrid



12/12 On the road ¿again?

¿Se acabó? ¿Termina un viaje cuando llegas a casa?

Seguramente no, de igual manera que no comienza cuando sales, sino mucho antes.

Es tiempo de asimilar lo vivido, de saber que nos ha cambiado. Para siempre. Que tal vez el imán de nevera con forma de koala se rompa algún día, pero que jamás olvidaremos al primero que vimos en libertad.

Es tiempo de redescubrir lo que ya conocíamos. Explorar nuestro día a día como si fueran tierras vírgenes y desconocidas. Hablar con nuestros amigos y familiares con la misma sed de conocerles que teníamos cuando hablamos con los que hemos encontrado en este viaje.

Y es que, en este viaje, he intentado conocer más a las personas que se iban cruzando en nuestro camino. No sólo contestar de where i from, sino preguntarlo también.

Gracias por estar ahí. Sois parte importante de este viaje, no sólo por el feedback que producís, sino por el esfuerzo que provocais de exprimir cada día para poder compartirlo. Gracias.

En cada viaje intentamos explicar con qué nos quedamos. La pregunta que más hemos oído es "¿qué es lo que más te ha gustado?". No renegaré de la magia de Uluru ni de la magia de nadar por primera vez y que además sea en la Gran Barrera de Coral. Ni tampoco de la desbordante y desbocada naturaleza, que nos ha ofrecido espectaculares paisajes, vegetaciones increíbles y preciosos animales. No me quejaré de sólo haber podido intuir el cielo estrellado y no conseguir ver la Cruz del Sur.

Para mí este viaje se resume en dos imágenes.

Una es ésta: la naturaleza luchando por sobrevivir mientas el ser humano se carga el planeta. El único planeta que tenemos para vivir.




Y la otra es la carita de Ingrid al ver la Sydney Opera House. Pero esa... me la guardo para mí.



On the road again,
goin' places that I've never been,
seein' things that I may never see again.

And I can't wait to get on the road again.

On the road again,
like a band of gypsies we go down the highway,
we're the best of friends
insisting that the world keep turning our way

And our way
is on the road again



Juan Carlos

martes, 15 de diciembre de 2015

11/12 Melbourne V

Último día. Nos damos un paseo por el río Yarra. Bueno, por el río no, que aunque ya sé nadar, hace frío.




Vaya día plomizo... Australia está triste porque nos vamos... No, en realidad es que está nublado. Aunque en Melbourne el tiempo es conocido como "las cuatro estaciones", porque cada día tienen sol, lluvia, viento, ... Seguro que más tarde mejora.

Una cosa que echaré de menos es la comida. Por ejemplo, la de hoy:







¿Os he contado que en Australia no se puede hacer topless (no todo es bueno...) y que los pendientes llevan una tira de plástico transparente? La ley no permiten que te los pruebes, así que se cogen de ahí para acercarlos a las orejas a ver cómo te quedan. No viene a cuento de nada, pero como esto se acaba...

Pasamos el día sin rumbo... Paseando, tomándole el pulso a la ciudad. Sale el sol. No dejamos de pensar que es el último día y que se va a hacer muy largo porque ya hemos dejado el hotel y nuestro avión no sale hasta las 3. De la madrugada.

Justo hoy descubrimos que hay un restaurante que circula de noche. Digo circula porque es un tranvía. Aunque ya es tarde para probarlo...




Podría parecer que el día está a punto de terminar, pero no. A las 22h empieza el viaje de vuelta, que consistirá en un shuttle que nos lleva hasta el autocar que nos acercará al aeropuerto. Nuestro vuelo sale a las 3 y pico de la noche. Un avión que nos llevará hasta Kuala Lumpur donde, en teoría, sólo bajamos un momentito para que llenen el depósito y seguimos.

Nada más bajar del avión, control de seguridad. Pero si esto es zona internacional... Te jodes y tiras el agua. Seguimos hasta Dubai, donde hacemos una escala y cambiamos de avión. Pasando, en zona internacional, otro control de seguridad donde hay que volver a tirar el agua. Y, por fin, último avión hasta Barcelona que aterrizará unas 30 horas después de que despegaramos en Melbourne y unas 45 desde que dejamos atrás el hotel y, por consiguiente, su ducha.


Juan Carlos

viernes, 11 de diciembre de 2015

10/12 Melbourne IV

Como el Night Market estaba tan animado, nos vamos a ver que tal está en su versión diurna: el Queen Victoria Market.

Me resulta curioso tanta referencia a Inglaterra. Desde la bandera hasta los nombres de muchos sitios o la cara de la Reina Victoria en la moneda. Cierto es que fueron colonia inglesa, pero... Nueva Zelanda, por ejemplo, está votando entre varios diseños nuevos de bandera.

En eso también se parece a EEUU; no tienen una gran historia (aborígenes aparte), ni unas tradiciones antiquísimas (aborígenes aparte) y todos provienen de inmigrantes (aborígenes aparte).

Aparte de la "zona guiri", hay una zona de alimentación en la que parece que te atiendan desde el escaparate.







Como hemos ido haciendo cambios sobre la marcha en lo que queríamos ver, lo que tenemos para hoy es a la puesta de sol, así que para matar tiempo (y dinero) volvemos a un centro comercial que ya habíamos estado, el Harbour Town Centre, a por alguna cosilla que habíamos dejado pendiente.







Para llegar hasta aquí hemos usado el tranvía 35 y hemos visto una imagen que muestra bastante bien lo que a mí me trasmite la sociedad australiana.

El 35 es el city circle, un tranvía gratuito como todos los del centro de la ciudad pero que al ser circular y de coches antiguos, lo usamos principalmente los guiris. Una parada antes de bajarnos veo que el conductor habla por la ventanilla con un abuelete entrañable que está en el andén. El conductor le convence para que suba, pues parece que el abuelete anda algo perdido.

El conductor de un tranvía gratuito para guiris (imaginad esto allí, o sea ahí donde estáis vosotros) se baja del tranvía para ayudarle a subir. Después, no arranca hasta que no comprueba que está sentado. Una parada más tarde, el chófer vuelve a salir para ayudarle a bajar y le indica hacia donde debe ir. Pura amabilidad australiana, muy parecida a la de EEUU. ¡Cuánto tenemos que aprender!

Hoy toca comida ligerita, que se acerca el inicio de la "Operación Galets", así que una pita de pollo nos sienta divinamente.

El tranvía circular nos llevará a dar una vuelta (valga la redundancia) a la ciudad hasta Federation Square, donde cogeremos el tranvía 16 hasta St Kilda, que está a 5km. En la foto se puede apreciar la playa de St Kilda y el skyline de Melbourne al fondo.







Hay un montón de gente haciendo kitesurfing en el puerto.







Pero no hemos venido aquí a ver surferos. Hemos venido a ver pingüinos.

Los pingüinos (que ya deberíais saberlo del GOR) regresan a tierra tras ponerse el sol. Aquí hay una colonia instalada en las rocas del rompeolas que hay detrás y debajo de esta pasarela de madera, así que llegan nadando y aparecen por cualquier parte. Nos colocamos junto al trocito de playa que hay con la esperanza que alguno quiera pasar por tierra.







Llegamos nada menos que dos horas antes de la puesta de sol, lo que se transformara en casi tres horas de espera antes de que aparezca el primer pingüino en el agua. En la roca aparece uno cuando todavía hay luz, lo que me permite hacerle una foto decente.







¿Qué bicho esUN PINGÜINO, que ya lo has dicho antes!!

El pequeño trozo donde llegan estos bichejos se llena de turistas y de voluntarios que velan para que se pueda disfrutar al máximo de ellos pero molestándolos lo mínimo. Para ello no dejan sentarse con los pies colgando hacia la arena ni hacer fotos con flash, pero ellos portan unas linternas con filtros rojos con las que los van iluminando para que se les vea, porque cuando llegan es de noche totalmente.













Tenemos la suerte de que se pasean o se paran justo delante de nosotros. Son preciosos, muy graciosos y hacen un ruido curiosísimo.







Y ya no hay más fotos. Ha empezado a soplar un viento helado que nos ha hecho ir casi corriendo hasta el tranvía... Así que eso es todo por hoy...

Juan Carlos

10/12 St. Kilda

Ahir vam veure el Queen Victoria Market de nit i ens va encantar. A veure què tal de día.







Té una part de mercat de roba, souvenirs, etc, (on ahir hi havía tota la restauració) i la part més autèntica i no tant turística de fruita i alimentació en general.







La carn feia una pinta envejable però no ens hauría arribat en condicions a Mataró. Algú sap si podem comprar cangur i/o cocodril a la boquería?







I la pregunta del milió:
Aconseguirem trobar les sabates per en JC abans de marxar? Ara ho sabrem al Harbour Town Melbourne, un centre comercial obert tipus La Roca Village però amb molts més descomptes.

El City Circle Tram ens hi deixa a la porta, ens fa visita guiada, té molt d'encant i a més a més és gratuït. Què més podem demanar?
Ah, si, les sabates!













Un parell d'hores després marxem sense sabates però amb la panxa plena de menjar mexicà. Una mica de pollastre a la planxa amb enciam i tomàquet per calmar l'estómac (si, ja ho sé, amb patates fregides, però tampoc podem tirar-nos al menjar saludable així de cop).







Aquesta tarda sortirem de la Free Tram Zone i ja s'ho cobren, ja. Un bitllet per St. Kilda ens costa 13,55$ però ja no vindrà d'això.

St. Kilda és un barri situat 5km al sud de Melbourne molt popular entre el turisme perquè té una platja on s'hi pot banyar i amb prou vent com per fer kitesurf.








YouTube Video



També hi ha un mercat hippie amb paradetes de menjar i el Luna Park, un parc d'atraccions.







Al final de tot de l'escullera del port hi viu una colònia petita de pingüins que, com els de la Great Ocean Road, arriben a la costa just després de posar-se el sol per dormir entre les roques.







En aquest vídeo moooolt fosc es pot veure com n'arriben 2 i surten caminant fins amagar-se sota nostre.


YouTube Video



Ja fa estona que s'ha amagat el sol i fa molt de vent i fred en el camí de tornada a l'estació del ferrocarril, però un cop dins en 20min som a l'hotel.

Només ens queden 24h...

Ingrid

jueves, 10 de diciembre de 2015

9/12 S'acaben les piles... i els díes...

Avui sortim molt tard de l'hotel. Les vacances han de servir per carregar bateríes? Doncs les meves piles mentals estàn a tope, però les físiques les tinc sota mínims...
Esmorzar reconstituent, una bona dutxa i a caminar!

Els carrers de la zona central em recorden al Portal de l'Àngel però amb tranvíes a dues bandes i sense haver de vigilar si venen les rumanes a robar-te la cartera.













No hi ha res millor que relaxar-se en un banc i passar-se una bona estona contemplant a la gent i escoltant les diferents melodíes que es barrejen dels músics de carrer.

I seguim el camí en direcció al riu Yarra sense tenir cap pressa ni rumb decidit, només gaudint del passeig, la companyía i del bon día que fa.

Arribem a City Square, aquests díes convertida en Christmas Square i la que tenen liada és bona amb Elfos per tot arreu, un arbre de Nadal gegant, el pessebre i una filera de gent que espera per...













...per veure Santa Claus!
Li hem explicat que la Noa, l'Ada i Elnenmésguapodelmón s'han portat molt i molt bé i n'ha près nota. També li he demanat més díes de vacances però diu que això no està a les seves mans.







I seguim passejant fins Federation Square, la plaça on ahir hi vam veure l'arbre de Nadal de Lego.
Avui hi tenen uns escacs enormes i tumbones per prendre el sol.







Ens passem una estona jugant amb la webcam per sortir a la pantalla gegant com si fossim dos nens, jejeje.







Quin contrast, no? Nadal=Estiu
Hauríem d'haver restrassat les vacances i fer-les coincidir amb Fí d'Any (no... millor no que Carcassonne també promet!!!)













Creuem el riu cap als Queen Victoria Gardens que ens criden i criden i criden perquè fem una migdiada a la seva gespa i, es clar, amb aquest paisatge i el solet que fa no els podem defraudar...







Quin relax... Això és vida!
I avui és dimecres, el día del mercat nocturn al costat de l'hotel.
Quan passem per Federation Square comença la projecció d'una pel.lícula a la pantalla gegant, fan "The Grinch". Que bé s'ho monten a Melbourne!







Però la peli la podem veure a casa i el Queen Victoria Market ens queda una mica lluny, així que millor anem a descobrir el mercat nocturn.

Mola!

És una pedazodenauindustrial sense parets i amb una pila de parades de menjar de diferents països tot amenitzat amb escenaris de música en directe. Al centre hi han taules per asseure's a menjar i parades on venen tot el que et puguis arribar a imaginar.



















Fins i tot fan depilacions de celles... Jejeje







I, es clar, que ens hi quedem a sopar.
En JC decideix tastar menjar Nepalí i jo sóc una mica més golafre i em cruspeixo una Pavlova, un merengue típic Australià que està boníssim.







A la merda la dieta!







Bona nit i fins demà.

Ingrid